El email marketing sigue siendo una de las estrategias digitales más usadas hoy en día. Con la expansión del internet y de las redes sociales, en las que es necesario y forzoso abrir una cuenta de correo electrónico, llegar a más personas es posible y va en aumento.

Sin embargo, implementarlo no es tarea sencilla, sobretodo porque puede llegar a ser considerado SPAM, afectado la venta y posicionando inadecuadamente a la marca. Por ello, es vital definir bien los públicos, saber a quién se le está mandando el mail con base en sus gustos, preferencias y hábitos de consumo.    

En el email marketing hay que evitar:

1.    No disponer de una base de datos depurada y eficiente, que esté llena de  información actualizada del público.

Para ello, hay que tener un formulario de atención que permita la máxima segmentación. No se trata sólo de obtener el mail, sino de tener un perfil completo de consumo.  

2.    Correos mal escritos o títulos en “asunto” mal planeados.

Esto es lo primero que el cliente potencial ve, por ello es que el asunto debe despertar interés para ser abierto y no desechado al momento. Además, la dirección debe estar correcta pues puede llegar a alguien más que no es el target y crear molestia.  

3.    Todo mail tiene que tener un “call to action”. 

Debe existir una llamada a la acción clara y atractiva. Además, no debe ser combinado con otros canales de comunicación: se trata de implementar estrategias 360 que acompañen al usuario en todo proceso de compra. Al incluir una liga, debe llevar directamente a lo que el consumidor le interesa.

4.    Enviar un mail masivo sin personalizar.

Antes que nada, una de las cosas más importes es implementar una estrategia de “permission marketing”, en donde el consumidor da autorización a la marca de enviar comunicados.  

Una vez esto, hay que destruir la idea sobre el email marketing y el envío masivos a bajo costo. En realidad la ventaja más importante no es el ahorro, es la segmentación de bases de datos.

Al enviar un mensaje a toda la base se logra un CTR (click through rate) muy bajo. Al seleccionar los destinatarios es posible hacer envíos más pequeños pero con mayores tasas de interacción. Así, se puede eliminar registros en la base de datos que no funcionan, y ahorrarse en tiempo y dinero el envío.

5.    Utilizar un software en un servidor público en grandes empresas.

El email marketing depende en gran medida del servidor de correros. Tratar de ahorrar en infraestructura redunda en menores tasas de apertura y en muchas ocasiones en ganarse un título de SPAM. Un error común es instalar un software en un servidor propio y creer que es todo lo que se debe hacer. Sin embargo, en el mediano plazo creará problemas ya que los correros puede ser detectado como SPAM por ser provenientes del mismo servidor.

6.    Utilizar formatos JPG  

Un HTML o mensaje de email marketing es un folleto electrónico. Su objetivo es lograr un impacto favorable en el consumidor que se traduzca en una acción positiva para la marca. Los formatos JPG son simples, y en la mayoría de los casos desechables.   

7.    No medir resultados 

La estadística de un envío no acaba con la apertura de la pieza de correo. Siempre existe espacio para mejorar. Hay que medir resultados, revisar el comportamiento histórico de envíos. Encontrar perfiles psicográficos. 

8.    No prestar atención a los dispositivos móviles

Ignorar los dispositivos móviles puede costar caro. Cada vez más personas revisan sus mails y redes en sus dispositivos. Lo malo del asunto es que muchas veces los correos no son posibles de ver en sus pantallas. Por ello, es necesario configurar los códigos de visualización.  

“La personalización es una de las claves del éxito del email marketing, ya que los consumidores verán cubiertas necesidades o gustos a través de lo que el correo electrónico le ofrece, aumentando las posibilidades de que lo abran e interactúen con la marca o compre”.